En el marco de los 222 años de la llegada del pueblo Garífuna a Centroamérica, el presidente de la República, Bernardo Arévalo, junto con las organizaciones del pueblo Garífuna, firmaron este 27 de noviembre una agenda de trabajo conjunto en Livingston, Izabal. Este acuerdo reafirma el compromiso del Gobierno de Guatemala con el reconocimiento y la inclusión del pueblo Garífuna en el desarrollo sostenible y equitativo del país.
La agenda establece compromisos estratégicos en áreas clave como economía, salud, educación, medio ambiente y derechos de los pueblos indígenas. Entre las iniciativas destacan el fortalecimiento del turismo comunitario, la implementación de programas de educación bilingüe e intercultural, la construcción de infraestructura básica, como un malecón para mitigar daños ambientales e impulsar el turismo, y la promoción de un programa de salud con pertinencia cultural garífuna. Además, se incluye la creación de un Instituto de la Cultura Garífuna para el Desarrollo.
Durante su intervención, el presidente Arévalo subrayó la importancia de este acto: “Mi gobierno se compromete a promover el respeto a la especificidad garífuna y a trabajar en programas que fortalezcan la salud, la educación y la economía local, al tiempo que respetamos y cuidamos la naturaleza”. También resaltó el protagonismo histórico de las mujeres garífunas en la organización comunitaria y en la construcción democrática de la nación.
Este acuerdo marca un paso significativo hacia el reconocimiento de los derechos históricos del pueblo Garífuna y la construcción de una nueva relación entre las instituciones del Estado y las comunidades indígenas y afrodescendientes. El presidente enfatizó que esta agenda representa un esfuerzo conjunto para superar las estructuras racistas y excluyentes del pasado, avanzando hacia una democracia más inclusiva y basada en el diálogo intercultural.